ITURBIDE
LLEGA A CERANO
Perdido
en los vapores de los recuerdos.
Había gran alboroto entre los
habitantes del pueblo de Cerano; corría el año de 812 un personaje muy importante anunciaba su llegada nada
menos que el señor Agustín de Iturbide.
Las mujeres de
la alta sociedad lucían sus vestidos de gala mientras los hombres de traje y
sombrero ensayaban sus mejores saludos para este tipo de la ocasión. Fue hasta las 8:00 de la noche
cuando hizo su entrada triunfal venía el señor Iturbide al frente de la tropa custodiado por sus generales montado en una
hermosa yegua alazana obsequio personal de Félix María Calleja.
Se observaba
fatigado tal vez por las largas jornadas a caballo pero, no perdía su gran
sentido del humor; de acuerdo a la usanza de aquel tiempo recibió un gran ramo
de flores mientras su frente coronada
con una rama de olivo y laurel era fiel
imagen de un emperador romano. En su honor se hallaba preparado un gran
banquete con una gran variedad de platillos la conversación entorno a las hazañas
ocurridas durante las batallas hasta en el último rincón del salón principal de la hacienda podían escucharse las
risas por un buen chascarrillo o por las finas ocurrencias de un caballero
asistente a este gran evento no faltaba
aquel chiste subido de color contado por una de las damas ahí presente.
Cuando todo era
algarabía entro un mozo pidiendo silencio a todos los presentes para escuchar
unas palabras por parte del invitado de honor apenas iba a complacer a los concurrentes se acerca un segundo mozo para indicar que la
cena estaba lista, invitando a los presentes a pasar al comedor.
No se sabe la razón por la cual a pesar de lo
exquisito de los platillos él apenas probo bocado la explicación más lógica
sería el haber recibido informes de la presencia en esos lugares del Manco
Albino un perseguido por las fuerzas realistas y la captura fin principal por
lo cual se encontraba visitando los sitios por donde según rumores merodeaba.
Argumentando
sentirse fatigado pidió le fueran mostradas sus habitaciones para retirarse a
descansar. Ya en sus aposentos uno de
sus asistentes personales le mostro un papel este lo leyó estampando su firma
posteriormente entrego el manuscrito y se dispuso a descansar repasando uno por
uno los hechos hasta ese momento ocurridos en especial su participación en la
conspiración de Morelia, el levantamiento de Hidalgo su aprensión y
fusilamiento.
Al día siguiente
cuando aún las estrellas no dejaban el firmamento salía del pueblo tal como
había llegado de noche llego y de noche se fue, a lo lejos se iba perdiendo la imagen
de aquel pequeño poblado que aunque de forma efímera recibió la visita de aquel
personaje de la independencia y los testigos de aquel hecho son hoy vagos
recuerdos perdidos entre los vapores de la historia.
Es verdad Chema, pero te aclaro que no fue en el año de 812, sino que fue en año de 1812 cuando el gran emperador Don Agustín de Iturbide piso suelo ceranence Ok. DE cualquier modo, te felicito muy buen trabajo, adelante.
ResponderBorrarTe espero el lunes en el curso.